Demolición de hormigón
Para demoler el hormigón, primero se quiebra el muro o panel verticalmente; después, se crean bloques rectangulares con roturas horizontales. Normalmente es suficiente un único cilindro quebrantador, como mucho dos.
Las barras finas o medianas de la armadura normalmente se parten ellas solas. Si esto no ocurriera, es conveniente crear bloques de un tamaño práctico mayor para reducir el número de barras que se deben cortar.